Caminando hacia los Pet Nat !

Caminando hacia los Pet Nat !

     Otro año más que se nos va y con este sumamos ya diecinueve. Diecinueve años lleno de mil cosas, unas buenas y otras evidentemente no tanto, pero a pesar de los pesares aquí estamos y con suerte aún seguiremos un ratito más dando guerra.

    Agradecer, agradecer mucho,  a todos los que lleváis con nosotros desde nuestros inicios viéndonos crecer año tras año y a todos los que habéis llegado acompañándonos en nuestros últimos pasos .

     Agradecer a todo nuestro equipo porque es muy obvio que sin ellos no estaríamos donde estamos.

     Agradecer a todos nuestros bodegueros por confiar en nosotros y dejar que seamos su cabeza visible al otro lado del charco.

     Gracias, muchas , muchísimas gracias a todos y lo mejor para cada uno de vosotros en este nuevo año que tenemos a la vuelta de la esquina.

      Dicho lo dicho y como no podía ser de otra manera vamos a despedirnos hasta el año que viene con vino y esta vez nos vamos al mundo de los Pet Nat y quiero compartir con vosotros un artículo escrito por Ricardo Sanchoyarto autor del blog Aprender de Vino, disfrutad !

    ¿ Qué son los vinos Pet nat ?

    " Los vinos pét-nat se han convertido en la última corriente que ha llegado al mundo del vino siguiendo la estela de los vinos naturales. El término procede de Pétillant Naturel, que en francés designa los vinos naturales ligeramente espumosos. El término pét-nat alude por tanto al estilo y a la forma en la que se han elaborado esos vinos. 

     Los vinos Pet Nat se elaboran por la técnica más simple y antigua que se conoce para conseguir un vino espumoso, el conocido como Método Ancestral (que es totalmente diferente del Método Tradicional usado en Champagne o Cava) Los primeros vinos espumosos de la historia fueron con toda seguridad el producto de la casualidad y necesitaron de la aparición de la botella de vidrio para su asentamiento. En las zonas geográficas más frías, la llegada del invierno implicaba una marcada bajada de temperatura, lo que detenía el proceso de fermentación al dejar inactivas a las levaduras. Algunos de estos vinos se embotellaban así y con la llegada del buen tiempo la actividad de las levaduras se reanudaba en el interior de la botella. El proceso de fermentación alcohólica implica que las levaduras consumen el azúcar presente en el mosto para convertirlo en alcohol, creando entre otros fenómenos asociados dióxido de carbono. Este gas habitualmente se expulsa al exterior del recipiente de fermentación pero en el caso de las botellas cerradas pasa a integrarse en el propio líquido creando lo que conocemos como vinos espumosos. A buen seguro los primeros cierres de la historia tendrían verdaderos problemas para contener la presión ejercida en el interior de la botella y las bodegas verían llegar la primavera con la celebración del descorche espontáneo de multitud de ellas. El resto de botellas cuando se abrieron para su consumo ofrecieron la agradable sorpresa de disfrutar de un vino totalmente diferente a lo que se había elaborado hasta entonces.

    Esto que claramente fue un hallazgo fortuito y considerado durante mucho tiempo un defecto del vino y una pesadilla para el elaborador llevó a algunos a buscar la forma de recrearlo. Se aprendió a controlar la fermentación y elegir el momento de embotellado para que el carbónico se integrara y se desarrolló un cierre que impidiera la apertura accidental. El vino pasa directamente del depósito de fermentación a la botella. Este sistema implica que sólo los azúcares y levaduras presentes en el vino, sin ninguna adición, pasan a la botella y que una vez finalizada la fermentación las lías, restos de levaduras y otras sustancias, permanecen en el interior de la botella pudiendo causar cierta turbidez. Los vinos pét-nat se elaboran siguiendo este sistema ancestral como fuente de inspiración, al que además se le añaden con total libertad diferentes variantes en función del elaborador y sus inquietudes por experimentar. Los tanques con control de temperatura para enfriarlos y detener en el momento oportuno la fermentación, antes del embotellado, son la actual herramienta tecnológica imprescindible en este tipo de vinos.

      El boom actual de estos vinos hay que localizarlo inicialmente en la región vinícola francesa de Loira  en los años 90 del siglo pasado. En ese momento se viven los primeros pasos de los vinos naturales y algunos elaboradores, entre los que se encontraban Thierry Puzelat y el tristemente desaparecido Christian Chaussard a quien se atribuye la creación del término pét-nat, estaban experimentando en bodega con productos sobre los que realizaban mínimas intervenciones. La aparición de este estilo de vinos pudo deberse a un accidente fortuito o a una búsqueda pero, de cualquier manera, se convirtieron en aquellos vinos que se compartían entre amigos en los ratos más distendidos. Poco a poco otros elaboradores, quizá animados por ser un sistema más fácil y barato que el método tradicional, comenzaron a investigar por su cuenta y en los últimos años el estilo se ha internacionalizado con vinos procedentes de multitud de regiones vinícolas.

     Los vinos pét-nat se caracterizan por ser vinos blancos, rosados o tintos, de añada, elaborados principalmente en regiones frías  que presentan niveles más bajos de alcohol, son secos o con un nivel bajo de azúcar residual, son ligeramente espumosos, presentan en su mayor parte sedimentos que en ocasiones pueden velar el vino ya que no se filtran y como rasgo exterior más distintivo la mayoría de las botellas están cerradas con una chapa. Estos vinos suelen comercializarse con la categoría legal de Vino ya que no encajan en las figuras legales superiores de criterios geográficos.

     Las primeras elaboraciones eran completamente salvajes ya que el vino no se sometía a ningún tipo de degüelle o estabilización, siendo fieles al espíritu de los vinos naturales elaborados con mínima intervención buscando la máxima expresión del terroir. Aquellas botellas eran, y lo siguen siendo todas las que se elaboran con esa misma filosofía, una ruleta rusa en la que el vino podía haber evolucionado hacia una dirección u otra totalmente diferente, hacia lo sublime o hacia lo imbebible. Éste es también uno de los mayores atractivos para los enamorados de este estilo, son sorprendentes y divertidos, muy divertidos. Los vinos son frescos, deliciosos y recuerdan a las uvas con las que se han elaborado además de lo que al aroma y sabor hayan aportado las lías presentes en el vino "

 

     Dicho lo dicho a divertirse y para ello os vamos hacer llegar lo siguiente :  una botella de Aus Pet Nat, una  botella de Aus Pet Nat Rosé y para que compareis , una botella de Aus Bruant, un espumoso acogido a la D.O. Cava , todos ellos elaborados por la bodega Celler de Aus ubicada en Alella (Cataluña)

     Disfrutad y sed felices por favor !

 

     Costo : 2320 $